El Centro Cultural San Agustín de El Burgo de Osma se vistió de gala este sábado para acoger el Séptimo Encuentro de Viñas Viejas de Soria, trasladado por primera vez a la villa episcopal. El evento reunió a 16 bodegas de la asociación, representantes institucionales, bodegueros, hosteleros, vecinos y visitantes, convirtiendo a la localidad en la capital del vino soriano. El periodista Javier Pérez Andrés abrió el acto inaugural con un discurso directo, recordando sus inicios en San Esteban de Gormaz y destacando enclaves como Atauta. Subrayó la importancia de los productores que apuestan por sus viñedos, como Bertrand Sourdais. Pérez Andrés advirtió sobre la dificultad de transmitir al consumidor el valor de las viñas viejas, que producen poco y exigen un precio más elevado. Reclamó rigor, continuidad generacional y la capacidad de ampliar producciones sin perder autenticidad. El alcalde Antonio Pardo agradeció la elección de la localidad como sede y reivindicó la incorporación de El Burgo de Osma a la DO Ribera del Duero. Bertrand Sourdais, presidente de la Asociación, resaltó la importancia de reforzar la unión entre bodegueros y difundir su labor, destacando que el patrimonio reside en las viñas centenarias y los pequeños majuelos. La jornada contó con la participación de 16 bodegas, que ofrecieron catas comentadas para explicar cómo la defensa de los majuelos centenarios imprime carácter a los vinos sorianos.